Producción: Roberto Blanco Macor
Live Aid fue un fenómeno mundial que tuvo lugar al mismo tiempo, en dos lugares distintos, todo ello centrado en ayudar a recaudar fondos y sensibilizar a la opinión pública para paliar la hambruna en Etiopía.
El 13 de julio de 1985, la música mostró su costado más solidario con el Live Aid, uno de los acontecimientos más emblemáticos de la historia de la música, que logró reunir a las mayores estrellas de rock y pop como Queen, David Bowie, Sting, Elton John, Mick Jagger, Bob Dylan, Led Zeppelin, Madonna, U2, Tina Turner y Sting para recaudar fondos para contrarrestar la hambruna en Etiopía.
El Live Aid contó con dos conciertos simultáneos en el estadio Wembley de Londres, Reino Unido y en el John F. Kennedy Stadium de Filadelfia, Estados Unidos, logró una recaudación de más de 100 millones de dólares, según Forbes, y fue transmitido vía satélite en más de 70 países que duró más de 16 horas, siendo considerado uno de los eventos musicales más vistos en todo el mundo y uno de los mejores shows en vivo de Queen.
La logística fue tan compleja que artistas como Phil Collins viajaron durante el festival de un continente al otro para estar presentes en ambos conciertos, una proeza que simbolizó la magnitud de la jornada.
El baterista tocó con Sting en Londres y luego en Filadelfia con Led Zeppelin, aunque este espectáculo no fue el mejor ya que hubo problemas para ensamblar ambas baterías.
Queen en el mor concierto en vivo de la historia
Solo 21 minutos bastaron para que Queen, con Freddie Mercury al frente, marcaran a fuego la historia del rock con un show histórico, condensando lo mejor de su carrera en aquel pequeño lapso de tiempo. Tal es así que en 2010 fue elegido como el mejor concierto en vivo de la historia.
Según cuenta la autora Lesley-Ann Jones, que escribió el libro “Mercury: An intimate Biography of Freddie Mercury”, en los ’80 la banda sentía que su tiempo había pasado y era tiempo de dejarle lugar a otros artistas más emergentes como U2 y The Cure.
Sin embargo, el Live Aid llegó para demostrarles lo contrario: la historia de Queen aún no había terminado.
Wembley fue un antes y un después en sus vidas. No solo la gente se dio cuenta de lo imponente que fue Queen aquella tarde, sino que también supieron reconocerlo grandes músicos como Bono, Elton John, Paul McCarney y David Bowie, que en aquel momento se dieron cuenta que ese show iba a ser irrepetible en la historia de la música.
Comenzaron al calor de “Bohemian Rhapsody”, con un piano muy desafinado, en una versión abreviada, continuaron con “Radio Ga Ga”, donde Mercury dirigió las palmas y se mostró con soltura por todo el escenario.
Al cerrar la canción, el cantante comenzó a dirigir a todo el estadio con un “Ay-Oh”, todos los asistentes cantaron junto a Freddie Mercury, que en ese momento se tuvo que haber dado cuenta que ese show no sería como cualquier otro, que todo el tiempo que gastó Queen en ensayar para aquella presentación hizo que sonaran a la perfección.
Luego interpretaron “Hammer to Fall”, “Crazy Little Thing Called Love”, y cerraron con dos himnos: “We Will Rock You” y “We Are the Champions”.
El regreso de Paul McCartney
Fue otro gran momento en Wembley, escuchar en vivo a la leyenda Paul McCartney, quien no tocaba en vivo desde 1979 y fue otro gran momento de la noche.
Paul cerró el concierto de Wembley interpretando ‘Let It Be’ en piano.
Desafortunadamente, debido a un accidente de uno de los técnicos del grupo Queen, el micrófono principal de Paul falla durante la primera parte de la canción.
Sin embargo, la audiencia canta junto con él, y como suelen hacerlo todos, Paul es acompañado en la tarima por Geldof, Pete Townshend, David Bowie y Alison Moyet.
McCartney, como su esposa Linda, permanecieron en el escenario hasta el final, cuando todas las estrellas del Concierto de Wembley reaparecen para cantar ‘Do They Know It’s Christmas?’.
La canción de Jagger y Bowie que no pudo ser
El vocalista de The Rolling Stone y Bowie querían cantar “Dancing in the Street” en simultáneo desde Londres y Filadelfia, respectivamente. Llegaron a hacer pruebas pero el delay satelital era tan grande que resultaba imposible sincronizar.
Finalmente decidieron grabar el videoclip días antes y lo estrenaron durante Live Aid. Fue una producción exprés debido a que tuvieron un solo día de grabación en el East London Docklands. “Fue el video más divertido que hice en mi vida”, reconoció Mick Jagger.
No todo fue perfecto
Live Aid estuvo en el centro de la polémica por la actuación de Led Zeppelin, que se reunió después de tres años separados. La presentación fue caótica por la falta de ensayos y de sincronización con la batería de Collins.
Una ausencia importante
Uno de los grandes vacíos del Live Aid fue la ausencia de Michael Jackson, por entonces uno de los músicos más famosos del mundo. El cantante declinó participar.
No obstante, esto no deslució el conjunto de un simple concierto que intentó salvar el mundo.
Tina y Jagger dos grandes momentos
Tina Turner fue otra de las increíbles artistas del Live Aid. Durante una canción, Mick Jagger incluso actuó con el icono.
Luego del momento con Tina, Jagger subió al escenario para interpretar en solitario éxitos como “Just Another Night” y “Miss You”.
El accidente de Dylan y su comentario que enojó a Geldof
Bob Dylan actuó en el Live Aid. Durante su actuación, rompió una cuerda de la guitarra mientras tocaba con los miembros de los Rolling Stones Keith Richards y Ronnie Wood.
Wood acabó cediendo su guitarra a Dylan para que terminara su set, lo que dejó a Wood sin guitarra en el escenario.
Sobre el final de su set desde EEUU, el premio Nobel de la Paz, pidió que parte de los recuadado en este evento también fuera destinado a los granjeros estadounidenses que pdecían una fuerte sequía
Un balance que también generó polémicas
La organización recaudó más de 140 millones de dólares, destinados a combatir la hambruna en África. Aunque surgieron críticas sobre el posible desvío de fondos, Bob Geldof defendió públicamente la transparencia del proyecto, insistiendo en que la música había abierto un camino de ayuda sin precedentes.
Al año siguiente, el 13 de julio comenzó a celebrarse de manera informal como el Día Mundial del Rock, en reconocimiento al espíritu de unidad y solidaridad que mostró la comunidad musical.