Las altas temperaturas constantes han acelerado el deshielo al pie del cerro Tronador. El nuevo espejo de agua es una consecuencia directa del calentamiento global
La creación de un nuevo lago en Bariloche no es una buena noticia para la naturaleza. El nuevo espejo de agua se produjo por el derretimiento de un glaciar a causa del calentamiento global.
Es sabido que el retroceso de glaciares es una de las consecuencias más graves del cambio climático, y ver en pocos años un ejemplo concreto en un lugar muy visitado, genera preocupación.
Esto sucede en Bariloche, donde por el retroceso del glaciar Ventisquero Negro en el Cerro Tronador, se ha generando un nuevo lago que ya tiene 70 metros de profundidad.
Al respecto, el grupo de expertos a cargo de la doctora Beatriz Modenutti, investigadora superior de Conicet del Instituto de Investigaciones en Biodiversidad y Medioambiente (Inibioma) y de la Universidad Nacional del Comahue, que actualmente se encuentra desarrollando su trabajo en el cerro Tronador, aseguró: “En las regiones montañosas, el signo más evidente del acelere que tiene el cambio climático, es la pérdida alarmante de glaciares que lleva, a su vez, a la pérdida de un ecosistema particular.
Es que como consecuencia de una mayor temperatura promedio anual, hay un derretimiento constante de los hielos. Una de las consecuencias de manera directa, es el cambio de temperatura que sufren los lagos. Para algunos organismos que viven allí, que la temperatura suba 1 grado representa un cambio drástico en la reproducción de las especies, lo que da como resultado un desequilibrio en el ecosistema acuático. “Esos cambios pequeños representan un trastorno enorme”, agregó la experta.
Modenutti vienen investigando el derretimiento de este glaciar desde hace ya varios años. En 2018 publicó una investigación en el revista científica Freshwater Biology donde precisaba que el lago proglacial Ventisquero Negro mostró un aumento continuo en la superficie desde 2009, cuando ocurrió una inundación glacial (GLOF). “El glaciar Ventisquero Negro es un glaciar cubierto de escombros ubicado debajo de la línea de árboles; por lo tanto, el lago recibe agua de deshielo tanto de hielo limpio como rico en escombros”, indicaba.
En lo que respecta al glaciar Ventisquero Negro, “se observa una retracción importante durante los últimos años y la formación de un lago cada vez más grande que ya tiene 70 metros de profundidad”, añadió. “El lago exhibió altos niveles de turbidez debido a una alta concentración de sólidos en suspensión. Los perfiles de luz verticales mostraron que casi toda la columna de agua estaba afótica. La concentración de fósforo (P) fue alta y se relacionó positivamente con los sólidos suspendidos totales”, completó en el estudio.
Además, originalmente, el agua del lago es oscura. Sin embargo, ahora se detectan cambios en el río Manso y en el lago Mascardi, ya que el agua se está aclarando porque recibe mucha menos arcilla de los glaciares.
Incidencia del cambio climático
El clima de la Tierra ha variado muchas veces a lo largo de su historia debido a cambios naturales, como las erupciones volcánicas, los cambios en la órbita de traslación de la tierra, las variaciones en la composición de la atmósfera, entre otros. Pero, desde los últimos años del siglo XIX, la temperatura media de la superficie terrestre ha aumentado más de 0,6 C.
Este aumento está vinculado al proceso de industrialización iniciado hace más de un siglo y, en particular, a la combustión de cantidades cada vez mayores de petróleo y carbón, la tala de bosques y algunos métodos de explotación agrícola. Y “hay un cambio climático que puede llegar a ser crítico”, advierten los expertos. “A lo largo de las eras geológicas hubo cambios climáticos, por ende, no es la primera vez que el planeta sufre calentamiento y enfriamiento”, contó Modenutti
Y agregó, “lo que sucede en este momento es que, por efecto del hombre y particularmente de algunos países como Estados Unidos y China, emiten gases de tipo invernadero que provocan este calentamiento que actualmente sufre el planeta. Estamos en un período donde el cambio se ha acelerado y realmente es muy alarmante”.
Ante esta situación, “es necesario que los grandes países emisores comiencen a tomar conciencia de la situación para trabajar en la disminución de esas emisiones cambiando la utilización de la energía, no utilizando combustibles fósiles, por ejemplo”, alertó la investigadora.
Y finalizó: “Si bien, todos los países emiten gases de efecto invernadero y hay cuestiones personales que cada ser humano puede tener en cuenta para reducir el impacto, como el uso indebido e innecesario de vehículos para trasladarse de un lado a otro, “sin duda son los gobiernos los que tienen que tomar las medidas más importantes a nivel global”.