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Llegaron 18 móviles y seis camiones y en los próximos días se sumarán drones, camiones Unimog y helicópteros.
Rosario necesita mostrar otra cara y se empeña en llevar algo de tranquilidad a una sociedad inmersa en la angustia y el miedo. El miércoles llegaron más agentes de fuerzas federales que completaron los 450 anunciados por la ministra de Seguridad Patricia Bullrich y este jueves pasado el mediodía fue el turno del arribo de nuevos recursos para comenzar con el despliegue por las zonas más calientes de la ciudad santafesina.
Bajo una intensa lluvia, Clarín fue testigo de la llegada de 18 móviles y 6 camiones a la Agrupación Especial de Despliegue Rápido “General Martín Miguel de Güemes” del Ejército Argentino. Allí estuvieron Pablo Javkin, intendente de Rosario, y Federico Angelini, subsecretario de Intervención de Federal de la Nación. “Estamos recibiendo una primera tanda de apoyo logístico de las Fuerzas Armadas y del Ejército, que se va a complementar en los próximos días con el inminente arribo de helicópteros, drones y camiones Unimog”.
Desde este jueves las fuerzas federales empezaron a desplegar estrategias de seguridad “en las nuevas zonas de empeñamiento coordinadas con el municipio (Rosario) y con la provincia (Santa Fe). Son barrios puntuales que abarcan las zonas de Ludueña, Empalme Graneros, Tablada y General Las Heras, Triángulo Moderno, Vía Honda y Barrio Banana. Este apoyo logístico permite tener mayor cobertura a fin de lograr más presencia en los lugares más calientes”, explicó Angelini.
Desde las autoridades hacen saber que tienen la necesidad de responderle al vecino con hechos. “Queremos que vean que estamos trabajando intensamente para que todos nos sintamos más seguros. Eso para decirles a los vecinos. También es un mensaje para los delincuentes: que sepan que cuando quieran salir de su casa vamos a estar ahí para agarrarlos”.
Desde el Gobierno Nacional y también desde el municipio de Rosario se dijo que “no se busca llamar la atención ni generar efectismo poniendo a un prefecto, a un policía federal o a un gendarme con un casco en pleno centro de la ciudad. Nosotros vinimos a Rosario para pacificarla, para que los rosarinos puedan vivir mejor y en el barrio que se encuentre el vecino pueda estar tranquilo”.
“Nos estamos ocupando desde principios de enero y si bien es cierto que pasaron cosas graves días pasados, en los dos primeros meses logramos buenos resultados y una importante reducción del número de asesinatos”, hicieron saber Angelini y Javkin.
Según pudo averiguar Clarín, en 2023, entre el 1° de enero y el 14 de marzo hubo 77 homicidios, mientras que este año, en el mismo período, bajó un 60 por ciento: 30 asesinatos. “Además de la disminución de asesinatos, bajaron los delitos lesivos, robos, entraderas y balaceras. Claro que ante este momento de recrudecimiento vamos a mostrar mayor presencia del Estado, pero de un Estado coordinado, entre Nación, Provincia y Municipio. Acá nadie se salva solo y queremos que los delincuentes queden expuestos”.
Javkin habla de que “el trabajo es hora a hora, día a día, no es momento de hacer un balance desde el lunes, cuando estuvo la ministra Bullrich reunida con el gobernador Pullaro. Esto no es una sola cosa, son muchas y al mismo tiempo. Y debemos generar una acción cada día, con refuerzos aéreos y terrestres. Todo tiene que ver con una apoyatura logística para lograr el objetivo”.
¿Qué se busca con este operativo? “Que lo que vivimos la semana pasada, y que seguimos viviendo (amenazas de toda índice en el ámbito de la salud y la educación) se termine. Pretendemos ganar la batalla por la normalidad de la ciudad. No podemos permitir más que se paralice Rosario y que se infunda el terror, para eso la tarea principal es brindar seguridad en el territorio para recuperar la normalidad con una decisión política firme: nadie va a retroceder en ninguna de las medidas que se adoptaron (las realizadas en las cárceles con presos de altos perfiles) y que evidentemente generaron esta reacción. Que el delito no tenga la libertad que tenía ni en la cárcel ni en la calle”, enfatizó Javkin.
Muchos rosarinos, escépticos y basándose en situaciones similares ocurridas en 2023, aseguran que cuando se vayan las cámaras y los micrófonos, también se irán los efectivos de seguridad.
“Acá no hay plazos, vamos a quedarnos en Rosario el tiempo que haga falta. Es la decisión del presidente Javier Milei y la ministra de Seguridad Patricia Bullrich”, hizo saber Angelini. “Quiero remarcar que estamos trabajando muy fuerte en inteligencia criminal y penitenciaria, y se sabe que la mayoría de los delitos que suceden en Rosario se originan en las cárceles, por eso estamos cortando todos esos vínculos de los delincuentes con el exterior”.
El representante del gobierno nacional también agradeció “a Prefectura, Gendarmería, Policía Federal, el Ejército, la Armada y PSA, que reaccionaron y respondieron inmediatamente a los llamados del presidente Milei, el gobernador Pullaro y el intendente Javkin para pacificar la ciudad. Se trata de gente que no es rosarina, que viene de otros destinos, dejando sus familias para venir a ayudar a los vecinos de esa ciudad.
¿Qué decirles a los vecinos de Rosario sobre estos operativos que se implementarán? “Primero, que el miedo de salir a la calle lo tendrán los delincuentes, no los ciudadanos de bien, que hará su vida sin inconvenientes. Sabemos que vamos por el camino correcto, que con las medidas que estamos tomando les estamos cortando el negocio y la capacidad de violencia que quieren imponer. Hoy el vecino merece trabajo, no distracciones, por eso insistimos: estamos dándolo todo para volver a la normalidad. Queremos que Rosario no se paralice nunca más”, concluyó Javkin.
Rosario. Enviado Especial
MG