Tras un período de bajas en el interés, las billeteras virtuales volvieron a mostrarse como las opciones de ahorro más convenientes.
El panorama de las inversiones en medio de la situación que atraviesa el sistema financiero argentino puede parecer complicado. Con la volatilidad en las tasas de interés, los ahorristas se ven obligados a vigilar casi diariamente las opciones para poder generar mayores ganancias. Y aunque los medios cambian todo el tiempo, las cuentas remuneradas en billeteras virtuales demostraron ser de las ofertas más convenientes.
Las billeteras virtuales, que ofrecen intereses diarios y liquidez inmediata, ahora enfrentan una competencia no solo de los bancos, sino también entre ellas mismas. Ualá reaccionó rápido, manteniendo un esquema que ofrece una tasa base del 40% TNA, pero que puede subir al 45% si el usuario realiza consumos por $500.000 en el mes. Esta estrategia busca fidelizar al cliente y fomentar el uso constante de la aplicación, con un límite remunerado de $1.500.000 para saldos importantes.
No obstante, en rendimiento puro sin condiciones de gasto, Naranja X se lleva la delantera con un 43% TNA en su cuenta remunerada, aunque con un límite de remuneración de $800.000. Otras opciones intermedias incluyen Fiwind (41% con límite de $750.000) y Brubank (37% TNA con límite de $750.000).
Los “frascos” de Naranja X
En esta vertiginosa carrera, Naranja X se posiciona como una de las líderes con su propuesta de los “frascos”. Estos “mini” plazos fijos permiten inmovilizar dinero por períodos muy cortos con rendimientos superiores a su cuenta remunerada tradicional (43% TNA).
Los frascos de Naranja X ofrecen:
– 44% TNA a 7 días
– 49% TNA a 14 días
– 55% TNA a 28 días
Este último, el frasco a 28 días, iguala el 55% TNA del Banco CMF, colocándose así en la cima del ranking. Un usuario que invierte $100.000 en un frasco de 28 días puede obtener una ganancia de $4.583 en un mes, y si la inversión es de $500.000, la rentabilidad asciende a $22.916. De esta manera, Naranja X logró reposicionarse para competir directamente con los plazos fijos bancarios más fuertes.